Exposición Atlas

Alfredo Sarabia

04.11.2022

Galería Servando

En Alfredo Sarabia (hijo) se puede encontrar esa mirada —hacia el mundo— cargada de una inmensa fe religiosa, que no obnubila “como ese opio” que en ocasiones se ha definido a la religión toda. Asume, desde lo figurativo, el rol del gigante Atlas que carga la humanidad sobre sus hombros por el infinito, y a su vez reflexiona sobre el peso que lleva. A diferencia de Dios, que “vio cuanto había hecho, y todo estaba muy bien” (Gn 1, 31), Alfredo reconoce, a través de su cámara, los derroteros que ha tenido su realidad cubana, que para nada es ajena al mundo. Como artista del lente se siente atraído por el poder de la imagen, los colores y las formas. En todo ello encuentra el eco de aquel momento misterioso que se hizo llamar “de la creación”, y de ahí se inspira.

Para este artista no existe diferencia en mi opinión entre la experiencia religiosa y la creación artísticas, ambas van de la mano y son producidas por una esencia superior. El ser supremo se desdibuja y da paso a la idea creadora. Es así entonces que cuando Sarabia (Jr.) sale a las calles de su ciudad con su cámara, y captura los instantes en imágenes como las de esta exposición, le imprime esa esencia divida por la cual es guiado, y luego al revelarlas ejerce ese dominio creativo sobre el universo que le rodea. Es en ese momento que el Creador “trasmite al artista humano un destello de su sabiduría trascendente, llamándolo a compartir su esencia creadora”.

Tal vez esa relación tan íntima entre la trinidad que conforman Artista-Creador-Obra, que Sarabia ha decidido titular sus piezas con los versículos de las sagradas escrituras. Consciente que ese resultado está dado por la inspiración que de años de lectura de la Biblia ha podido obtener en su diario quehacer. Se convierte entonces esta muestra en un momento de contemplación y agradecimiento del artista, así como de comprensión de su vocación y misión, tal y como Atlas.

Más allá de la elevadísima calidad técnica como fotógrafo o la impresión exacta de las imágenes captadas. Para recorrer la muestra, recomiendo que el espectador se arme de una Biblia para poder dialogar mejor con las escenas propuestas. Eso le servirá para entender por qué la pieza Lucas 23:43 discursa sobre esos bellos pisos pulidos de granito, decorados en las aceras de la Habana, hoy muchos ya perdidos; el simbolismo de la imagen de Proverbios 14:12 o la fuerza de Revelaciones (Apocalipsis 13:8), que para algunos pudiera ser objeto de especulaciones o malas interpretaciones, al ser la imagen de portada del catálogo de la muestra.

He visto otras obras de Sarabia, pero esta exposición me ha revelado una faceta más allá que la de artista. En esta muestra cuidadosamente curada, donde los detalles están el ese aire que le da a las piezas estar suspendidas desde el techo y no aprisionadas en una pared, Alfredo ha revelado su propia personalidad. En su obra descubrimos dimensiones nuevas que se van dando por ese crecimiento espiritual que debe acompañar todo proceso creativo. Este es su modo de comunicar, y expresar la realidad que ve, y sigue cargando como artista sobre sus hombros.