Siempre es interesante como nos ven otras personas. Hoy escuchando la conferencia del especialista de Artprice Jean Minguet, sobre tendencias y otros elementos del mercado de arte, más que respuestas nos seguimos llenando de preguntas. Preguntas que lógicamente solo nos las responderemos nosotros mismos con la voluntad de hacer.

En una primera mirada, tres nombres sobresalieron como ejemplos «en boga» de la presencia de artistas cubanos en el Mercado Internacional: Wifredo Lam, Félix González Torres y el maestro Tomás Sánchez. Forman ellos parte del pelotón de avanzada que componen menos del 0.1% que son los artistas cubanos en el Mercado de Subastas internacionales. Pero, se obviaron nombres como son el propio Fabelo, Mendive, Los Carpinteros, The Merger por nada más mencionar algunos vivos, que también han tenido a lo largo de los años presencia significativa en varias subastas, según reza la propia base de datos de Artprice.

Mucho se habló de los NFT y como han subvertido la cadena de valor del mercado de arte, y se hubo de reconocer que las instituciones tienen mucho, pero mucho por hacer para no quedarse fuera (o mejor, entrar al mercado). Sobre ese tema en otro momento volveré.

A pesar de que muchos siguen viendo al Mercado como una posible afectación al desarrollo creativo y una desnaturalización de la creación artística, el día a día nos demuestra que vivir de espaldas a este únicamente ha creado un elefante rosado en medio de la habitación del cual nadie se da por enterado. Esta oportunidad, como señalé, reunió a muchos actores/agentes/intermediarios culturales necesarios para articular de manera armónica y natural lo que aspiramos sea nuestro Mercado Cubano de Arte. Ese es el gran éxito de esta visita, tal y como hace años fue la presencia de Alex Rosenberg: una pequeña luz para avanzar en ese camino.

Quedaron en el tintero muchas interrogantes que son igual de inquietantes. Pero repito, deberíamos ser nosotros quienes las acorralemos. No esperemos y hagamos, como dice el poeta, un «congreso de lo unido» y debatamos a «camisa quitada». Creo que podemos aprender más de las experiencias individuales de artistas, galeristas, artdealers, etc., y podamos parecernos más a nosotros mismos que al mundo.