Colectiva

19.04.2022

Galería Luz y Oficios

Hace unos meses un perfil en redes (Instagram) comenzó llamar mi atención. Luego de aceptar el follow en común, active la campana de notificaciones para estar al día con su quehacer. Es un mecanismo necesario en tiempos de bombardeo de información en estas redes sociales, para poder seguirle el ritmo al trabajo de varios artistas y proyectos en los cuales encuentro algo interesante a futuro. @einclued (Everything included) plantea ser un proyecto de promoción artística y cultural cuyo eslogan significa que: El arte es para todos. Siguiendo sus links se encuentra un pensamiento de redes acorde a los tiempos modernos. Acceso desde un único link a podcast, revista digital, redes sociales y más, que facilitan la conexión con los públicos y variedad de campos incursionados.

Recientemente bajo su gestión se presentó la exposición «Variis bene»en la sede de Luz y Oficios en la Habana Vieja. Un proyecto cuya finalidad me atrevo a significar va a compartir conocimientos nuevos y saberes a través de los procesos artísticos contemporáneos de un grupo de jóvenes artistas. Creando a través de ellos un diálogo interesante con los visitantes a mediado por las obras allí expuestas.

«Variis bene» como su traducción indica ofrece al espectador varias opciones. Nueve artistas en una muestra sin muchas complejidades de producción pero interesante discurso en las obras. Resulta significativa la ausencia de los colores vivos en las piezas, con excepción de las fotografías de la serie «Punto alto» en pequeño formato de Moisés Bermúdez, donde los colores de vitrales, cúpulas y bóvedas iluminadas marcan las imágenes. El resto de las piezas, incluidas otras fotografías y lienzos tienen el gris como principal color. Que se remarca más cuándo uno se enfrenta a la pieza «Lastre» compuesta por 504 dibujos a tinta de Harold Ramírez Veliz que cubren una amplia pared de la sala.

Un momento interesante en esta muestra y que señala la influencia que a pesar de las años sigue ejerciendo la obra de Antonia Eiris, es la pieza «Huelga de papel» confeccionada en papier mache, donde Aldo Soler Perez , a través de los míticos y polémicos micrófonos, le rinde homenaje. Otra de las piezas que refleja las inquietudes creativas de las generaciones actuales es «Haiku con maldad» -término creo que si mi oído y memoria musical no me falla viene de lo repartero- , donde Rolando Galindo Perez reconfigura el sentido de la original poesía japonesa y en una especie de libro artista recoge esas frases populares, cuya decodificación depende del nivel de cubanismo que tengamos.

Es entonces, que la exposición en sí, curada a ocho manos, es una muestra a la que se debería revisitar desde la mirada de la crítica profesional, a fin de señalarle los caminos correctos para seguir haciendo con buen gusto arte para todos.