Exposición Intruso

Omar Tirado

10.12.2022

Delirio Estudio Galería

Este artista se convierte en explorador, más que intruso en las vidas de aquellas familias que le abren el sacrosanto espacio es una casa/hogar. Allí, indaga lo que pasa no solo en la dinámica diaria, sino en las grietas emocionales que existen. Ejemplo son las cartas, fotos, objetos decorativos, que le son entregados en préstamo o intercambio durante estas vivencias para atestiguar la confianza en él depositada. Estos objetos son una parte   significativa de los vínculos emocionales y sentimentales que a lo largo de la vida se tejen con ese espacio físico que es la casa.

Es entonces cuando Omar traza un paralelismo entre las estructuras constructivas de estas viviendas con las vidas de sus moradores. Aprovecha la típica estructura de Deliro Estudio Galería, casa de época capitalista, y une los espacios con las tendederas y sus sábanas colgando en el interior, tal vez en franca alusión a ese refrán que reza: los trapos sucios se lavan en casa. El propio artista, en los videos-arte que proyecta sobre estas telas colgadas, nos permite reconocerlo cámara en mano, como ese elemento que no encaja en las escenas familiares. Se cuela en los más variados contextos y situaciones, cada cuarto me lleva a presuponer tal acción, pues a veces los elementos presentes llegan a ser tantos y tan variados que resultan llamativos, y hasta a veces extraños. Mapas turísticos, fotos, discos de vinilo, utensilios de uso diario, en fin.

De alguna manera, este sitio me recordó mucho a la pieza “Just what is it that makes today’s homes so different, so appealing?”. Las pinturas de Omar en las paredes, la fotografía que expuso en Galería Habana junto con el objeto/escultura, hecho con los propios libros que alguna vez cargó el librero original de madera, me recordaron la estructura del arte pop. En este espacio, donde la realidad es (re)construida con elementos de la vida real (antes descritos) y esa intervención que hace el propio artista con la ambientación del espacio, los colores de las luces, el emplazamiento de otros objetos descontextualizados, hacen que todo adquiera nuevos significados. Ya no es la reproducción pura y dura de la realidad vivida en esos caminos como intruso, sino, es la deconstrucción del mito de la sacralidad del hogar.

La investigación en arte, desde su propia práctica, me lleva a ubicar a Tirado, entre aquellos que ya desde la década de los sesenta y setenta se propusieron sacar el arte fuera de las galerías y museos con piezas pensadas para lugares específicos. De la obra bidimensional y pictórica que conocía a través de exposiciones como Estado de espíritu, Pinball club o Ausencia no quiere decir olvido, a esta exposición, junto a la posibilidad de asistir a la defensa oral de su tesis, con este mismo proyecto, me es posible evidenciar esa búsqueda constante como joven artista de su camino.