Exposición «Eduardo Rubén: pinturas 2018-2022», Eduardo Rubén García

Exposición Eduardo Rubén: pinturas 2018-2022
Eduardo Rubén García Herrera
21.04.2022
Galería Artis 718

La exposición «Eduardo Rubén, pinturas 2018-2022» presenta una selección de obras de Eduardo Rubén, quien, después de varios años sin exponer individualmente, nos sumerge en un universo de contrastes y emociones a través de sus lienzos. Con piezas que exploran la relación entre fragmentos de estructuras arquitectónicas y la condición humana, Rubén logra construir un discurso visual potente y conmovedor. Eduardo Rubén, a lo largo de su carrera, ha mostrado una profunda conexión -lo que se puede constatar en libro del crítico y curador Nelson Herrera Ysla sobre el artista- con la arquitectura, los espacios construidos y derruidos, dejando en evidencia su fascinación por la ciudad y sus elementos. Estos han sido, son y serán, una fuente inagotable de inspiración en su obra, y han influido en gran medida en la evolución de su estilo y su exquisita técnica.

Una de las características más notables de la exposición es el contraste entre piezas de tonos grises, negros y sepias. Esta paleta cromática, aparentemente sobria y monocromática, juega un papel fundamental en la evocación de sentimientos de nostalgia, melancolía y desidia social. La elección de estos tonos también refuerza la temática de la resistencia y la supervivencia humana, aludiendo a la persistencia del pasado y la lucha por la existencia en un entorno de abandono y decadencia. La ciudad, con sus edificaciones, elementos arquitectónicos, decorativos y estructurales, se convierte en el escenario donde Rubén teje sus narrativas visuales. El artista logra capturar la esencia de los espacios urbanos, tanto en su grandeza como en su decadencia, y presenta una visión única y poética de la relación entre el hombre y su entorno construido.

Las obras de Rubén presentan fragmentos de estructuras arquitectónicas en distintos estados de deterioro, mezclados entre sí, que a los ojos del espectador representan figuras humanas como elementos simbólicos. Estas composiciones generan una tensión visual que, al mismo tiempo, refleja la tensión emocional y psicológica que surge en situaciones de desánimo colectivo y desesperanza. El artista consigue transmitir una sensación de resistencia y perseverancia en medio de la adversidad -algo en lo que coincido con la mirada de la curadora Ariadna Cabrera-, utilizando elementos arquitectónicos como metáforas de la fortaleza y la resiliencia del espíritu humano.

En cuanto a la técnica, Rubén demuestra un dominio magistral del dibujo y la pintura, otorgándole a sus obras una textura y una profundidad que capturan la atención del espectador y lo invitan a reflexionar sobre el paso del tiempo, la memoria y la supervivencia. Su estilo pictórico, a la vez expresionista y detallado, nos hace partícipes de su mundo interior y sus preocupaciones artísticas. En su pintura, Rubén no solo se centra en la representación de edificios y estructuras, sino que también explora la importancia de los detalles arquitectónicos y decorativos. Estos elementos le permiten crear composiciones ricas en texturas y matices, que revelan su habilidad para capturar la belleza y la complejidad de los espacios urbanos. El resultado es una obra preciosista y exquisita, que refleja su profundo conocimiento y aprecio por la arquitectura y el arte en general.

Como observador, no puedo evitar sentir una profunda admiración por el trabajo de Eduardo Rubén. A través de sus pinturas, el artista nos invita a enfrentarnos a nuestras propias emociones y a reflexionar sobre la importancia de la resistencia, la perseverancia y la esperanza en tiempos difíciles. La obra de Eduardo Rubén destaca por su habilidad para integrar la arquitectura y los espacios urbanos en su narrativa visual, y por su enfoque preciosista y exquisito en la técnica. El artista nos invita a reflexionar sobre la relación entre el hombre y su entorno construido, así como sobre temas universales como la memoria, la resistencia y la esperanza. Su obra es, sin duda, un testimonio del poder del arte para conectar con nuestras emociones y provocar una profunda introspección.

La exposición «Eduardo Rubén, pinturas 2018-2022» es un testimonio del talento y la sensibilidad de este artista cubano, cuya obra merece ser vista y apreciada por un público amplio y diverso.