“Latin American Art Online” (5 – 15 marzo): Reflejos de Cuba, entre la Vanguardia y la Tradición

En la reciente subasta de arte “Latin American Art Online” (5 – 15 marzo) de la prestigiosa Christie´s , un espectro diverso de obras de artistas latinoamericanos capturó la atención de coleccionistas y aficionados, marcando un evento notable en el calendario del mercado de arte. Los resultados ofrecen una ventana fascinante a la dinámica actual del mercado, la apreciación artística y las tendencias emergentes. Este análisis desentraña los significados más profundos detrás de los números y proporciona una perspectiva sobre lo que estos resultados pueden augurar para el futuro del arte latinoamericano, en particular de artistas cubanos en el escenario global.

La subasta presentó una mezcla intrigante de obras que van desde las vibrantes pinturas de Manuel Mendive y Flavio Garciandía hasta las composiciones abstractas de Wifredo Lam y las piezas “sin título” de Luis Martínez Pedro y Víctor Patricio Landaluze, reflejando la riqueza y diversidad del arte latinoamericano. Los precios realizados y las estimaciones previas a la subasta revelaron tanto sorpresas como confirmaciones de la estima en la que se tiene a estos artistas.

Artist	Title	Price Realised USD	Estimate Low USD	Estimate High USD
VICTOR PATRICIO LANDALUZE	El encuentro	3,024	15,000	20,000
TOMÁS SÁNCHEZ	(1) La espera (2) La roca (3) Buscar al meditador	47,880	35,000	45,000
JUAN ROBERTO DIAGO	Mundo de Papel	5,670	4,000	6,000
RENÉ PORTOCARRERO	Flora	18,900	20,000	25,000
MANUEL MENDIVE	Untitled (from the series Mangos azules)	23,940	15,000	20,000
FLAVIO GARCIANDÍA	Untitled	23,940	15,000	20,000
WIFREDO LAM	Composition	15,120	5,000	7,000
LUIS MARTÍNEZ PEDRO	Sin título	12,600	8,000	12,000

Manuel Mendive y Flavio Garciandía, ambos con obras tituladas «Untitled» y pertenecientes a series notables, alcanzaron un precio realizado idéntico de USD 23,940, superando significativamente sus estimaciones de USD 15,000 a USD 20,000. Este resultado no solo destaca la alta demanda por sus obras sino también el creciente reconocimiento de su contribución al arte contemporáneo. Mendive, conocido por su exploración de temas afrocubanos, y Garciandía, con su enfoque crítico hacia la pintura y el arte conceptual, han logrado resonar con coleccionistas que buscan profundidad cultural y reflexión artística.

Wifredo Lam, cuya influencia en el arte moderno no necesita presentación, vio su obra «Composition» alcanzar USD 15,120, triplicando la estimación alta de USD 7,000. Este resultado es testimonio de la perdurable atracción por Lam, cuya fusión de surrealismo, cubismo y temas afrocubanos continúa inspirando a coleccionistas a invertir en su legado.

Los resultados de la subasta para las obras de Tomás Sánchez, Juan Roberto Diago y René Portocarrero ofrecen una panorámica reveladora sobre el valor y la percepción del arte cubano contemporáneo en el mercado actual. Tomás Sánchez, con su tríptico compuesto por «La espera», «La roca» y «Buscar al meditador», alcanzó un precio de USD 47,880, superando notablemente la estimación más alta de USD 45,000. Este éxito refleja el alto grado de apreciación por el meticuloso detalle y la profundidad espiritual que caracterizan la obra de Sánchez, posicionándolo como uno de los artistas contemporáneos cubanos más valorados en el ámbito internacional. Su capacidad para fusionar paisajes serenos con una meditación sobre la condición humana resuena profundamente con los coleccionistas, elevando su obra más allá de los límites estéticos hacia un plano de contemplación más profundo.

Por otro lado, Juan Roberto Diago, con «Mundo de Papel», logró un precio de venta de USD 5,670, situándose dentro del rango estimado de USD 4,000 a USD 6,000. Este resultado, aunque modesto en comparación con Sánchez, subraya un reconocimiento sostenido por la obra de Diago, quien es conocido por su enfoque crítico hacia temas de raza, identidad y la historia social de Cuba. Su obra se destaca por una narrativa visual que desafía y cuestiona, ofreciendo perspectivas únicas que enriquecen el diálogo sobre el arte cubano contemporáneo.

René Portocarrero, con su obra «Flora», alcanzó USD 18,900, quedando ligeramente por debajo de su estimación baja de USD 20,000. Este resultado puede interpretarse como una valoración cautelosa del mercado hacia su vibrante y distintivo estilo, que, si bien es celebrado por su exuberancia y colorido, en esta ocasión no alcanzó las expectativas pre-subasta. Sin embargo, la obra de Portocarrero continúa siendo altamente valorada por su contribución al paisaje artístico cubano, fusionando elementos del expresionismo, el surrealismo y la cultura cubana en una síntesis visual única.

Por otro lado, la obra sin título de Luis Martínez Pedro, un artista menos conocido en el mercado global pero altamente respetado dentro de Cuba por su contribución al movimiento de arte abstracto, alcanzó USD 12,600, situándose dentro de su rango estimado de USD 8,000 a USD 12,000. Este resultado, aunque modesto en comparación con otros, subraya un reconocimiento creciente y un interés sostenido en exploraciones abstractas del siglo XX.

Un caso particularmente interesante fue el de Víctor Patricio Landaluze, cuya obra «El encuentro» alcanzó solo USD 3,024, muy por debajo de su estimación de USD 15,000 a USD 20,000. Este resultado podría reflejar varios factores, incluyendo posiblemente un desajuste entre la oferta y las preferencias actuales del mercado o quizás una necesidad de mayor promoción y comprensión de su obra y su importancia histórica.

Outside Cuba Inside: Property From the Farber Collection of Contemporary Cuban Art… o el caso Farber

Artist	Title	Price Realised USD	Estimate Low USD	Estimate High USD
TONEL (ANTONIO ELIGIO FERNÁNDEZ)	Autorretrato como barco (Four Pyramids)	5,040	3,000	5,000	+
EDUARDO PONJUÁN AND RENÉ FRANCISCO	Nuevo, New, Nouveau	12,600	15,000	20,000	–
GUSTAVO ACOSTA	38°C	25,200	15,000	20,000	+
ARMANDO MARIÑO	La Patera, First Version	8,190	5,000	7,000	+
FERNANDO RODRÍGUEZ	From the series Sueño nupcial	15,120	20,000	25,000	–
EDUARDO HERNÁNDEZ SANTOS	Lo que es, lo que no es y lo que no es siendo	5,040	6,000	8,000	–
PEDRO ÁLVAREZ	Twenty (from the series Havana Dollarscape)	9,450	4,000	6,000	+
LOS CARPINTEROS	Cosmos	15,120	10,000	15,000	+
TOMÁS ESSON	Spoulakk	5,040	10,000	15,000	–
ROCÍO GARCÍA	Geisha Samurai (from the series Geishas)	5,292	6,000	8,000	–
JOSÉ BEDIA	Doce cuchillos	3,780	5,000	7,000	–
LÁZARO SAAVEDRA	From the series Metamorphosis	23,940	25,000	35,000	–
JOSÉ ÁNGEL TOIRAC	Eternity	6,300	8,000	12,000	–

La reciente subasta, que puso en relieve obras de la «Colección Farber de Arte Cubano Contemporáneo», ha arrojado luz sobre el diverso espectro de talento emergente y consolidado de Cuba. Esta colección, cuidadosamente acumulada por los Farber a lo largo de los años, ha servido como plataforma para que artistas de renombre y figuras en ascenso reciban el reconocimiento internacional que justamente merecen. Sin embargo, a pesar de la evidente riqueza y dinamismo que caracteriza al arte cubano reflejado en estos lotes, los resultados de la subasta han presentado un panorama complejo en términos de rendimiento en el mercado.

De las 13 obras presentadas, solo 5 lograron superar sus estimaciones iniciales, dejando un saldo de la mayoría que no cumplió con las expectativas pre-subasta. Este fenómeno podría interpretarse precipitadamente como un revés o incluso un fracaso en cuanto a los resultados de subasta se refiere. Sin embargo, esta interpretación requiere una consideración más matizada. A pesar de que no todas las obras alcanzaron o superaron sus estimaciones previas, es crucial destacar que todos los lotes ofrecidos encontraron comprador, un hecho que subraya un éxito indiscutible en términos de ventas completas.

Este contraste entre el número de obras que no alcanzaron sus estimaciones y la venta total de lotes plantea preguntas importantes sobre el mercado del arte cubano y, por extensión, sobre el mercado global del arte contemporáneo. Indica una disposición por parte de los coleccionistas para invertir en arte cubano, aunque también refleja la volatilidad y las expectativas cambiantes del mercado. La disparidad entre las estimaciones y los precios realizados puede deberse a una serie de factores, desde la fluctuación de la demanda hasta la apreciación crítica y cultural de las obras.

La «Colección Farber de Arte Cubano Contemporáneo» sigue siendo un testimonio del arte cubano como un vibrante campo de producción artística que continúa cautivando a un público global. Aunque algunos resultados de la subasta no hayan cumplido con las expectativas, el hecho de que todas las obras hayan sido vendidas confirma el interés sostenido y el valor percibido del arte cubano en el mercado. Este evento, lejos de ser visto como un fracaso, debe interpretarse como una oportunidad para reflexionar sobre las dinámicas del mercado y las tendencias que influyen en la valoración del arte contemporáneo.

Entre las ventas más destacadas se encuentra la obra «38°C» de Gustavo Acosta, que alcanzó USD 25,200, superando su estimación más alta. Acosta, conocido por sus paisajes urbanos meticulosamente construidos que reflexionan sobre la naturaleza del espacio y la historia, ha visto cómo su trabajo captura la imaginación de coleccionistas internacionales, superando expectativas y estableciendo nuevos precedentes para el arte cubano.

La subasta también destacó obras que se vendieron por encima de sus estimaciones iniciales, como «Autorretrato como barco (Four Pyramids)» de Tonel, que alcanzó USD 5,040, superando su estimación más alta. Este interés en Tonel refleja un reconocimiento más amplio del ingenio y la originalidad del arte cubano, y cómo la narrativa y el simbolismo juegan roles cruciales en conectar con la audiencia.

El resultado de «Cosmos» de Los Carpinteros, que se vendió por USD 15,120, ilustra el atractivo del colectivo artístico por su habilidad para fusionar arquitectura, diseño y escultura, creando obras que son tanto reflexivas como innovadoras. Su éxito en la subasta reafirma el lugar del colectivo en el mercado internacional del arte.

La subasta también vio un interés notable en «La Patera, First Version» de Armando Mariño, vendida por USD 8,190, dentro de su estimación. La obra de Mariño, que aborda temas de migración y desplazamiento, resuena con cuestiones globales actuales, reforzando la relevancia del arte cubano en discusiones contemporáneas sobre identidad y pertenencia.

Sin embargo, no todas las obras alcanzaron las expectativas de venta. «From the series Sueño Nupcial» de Fernando Rodríguez, por ejemplo, alcanzó USD 15,120, quedando por debajo de la estimación más baja. Este resultado puede reflejar las fluctuaciones del mercado y las variaciones en el interés de los coleccionistas, subrayando la importancia de la percepción y el contexto en la valoración del arte.

Contrariamente, la colaboración entre Eduardo Ponjuán y René Francisco, «Nuevo, New, Nouveau», no alcanzó las expectativas, vendiéndose por tan solo USD 12,600, una cifra que quedó muy por debajo de las estimaciones iniciales. Este resultado no minimiza, sin embargo, el interés sostenido en obras que abordan temas de identidad, cultura y política mediante un intercambio visual y conceptual. A pesar de no cumplir con las expectativas de venta, este resultado aún refleja una apreciación en aumento por el arte capaz de cruzar límites estéticos para incitar a la reflexión y al debate.

Además de los artistas ya mencionados, la subasta de la «Colección Farber de Arte Cubano Contemporáneo» presentó una selección diversa de obras que ilustran la profundidad y el alcance del arte cubano, ofreciendo perspectivas únicas a través de diferentes medios y temáticas. Entre estos artistas, destacan figuras consagradas que están definiendo el futuro del arte cubano en el escenario global.

Eduardo Hernández Santos, con su obra «Lo que es, lo que no es y lo que no es siendo», vendida por USD 5,040, refleja una indagación poética en la existencia y la percepción. Alcanzando el límite superior de su estimación, esta venta subraya la importancia de la fotografía y el arte conceptual en la exploración de cuestiones filosóficas y existenciales dentro del arte cubano contemporáneo.

Pedro Álvarez, con «Twenty (from the series Havana Dollarscape)», alcanzó un precio de USD 9,450, superando su estimación más alta y demostrando la relevancia de su crítica sociopolítica a través del arte. Álvarez utiliza la sátira y la parodia para comentar sobre la globalización, el capitalismo y la identidad cubana, conectando con un público que valora el ingenio y la profundidad conceptual en el arte.

José Bedia, con su obra «Doce cuchillos», alcanzó USD 3,780, quedando por debajo de su estimación más baja. La venta de esta pieza refleja la fluctuante recepción del mercado hacia obras que se sumergen profundamente en la espiritualidad y las tradiciones afrocubanas. A pesar de esto, Bedia sigue siendo una figura prominente en el arte cubano, conocido por su habilidad para tejer complejas narrativas culturales y espirituales.

Lázaro Saavedra, con «From the series Metamorphosis», alcanzó un impresionante precio de USD 23,940, aunque no cumplió con su estimación inicial. La obra, que abarca una serie de emociones y estados de ser a través de una mirada introspectiva y crítica, destaca por su capacidad para dialogar con el espectador de manera directa y provocativa, planteando cuestiones sobre la identidad y la transformación personal.

José Ángel Toirac, cuya obra «Eternity» se vendió por USD 6,300, ofrece una reflexión sobre el tiempo, la memoria y la historia. Aunque no alcanzó su estimación más baja, la obra resalta el enfoque único de Toirac en la reinterpretación de iconografía y momentos históricos, cuestionando la narrativa oficial y explorando la construcción de la memoria colectiva.

Rocío García, con su obra «Geisha Samurai (from the series Geishas)», no ha logrado superar su estimación más baja, vendiéndose por USD 5,292. A través de una estética cuidadosamente construida, García explora la complejidad de la identidad y el género, temáticas que son de suma relevancia en el discurso contemporáneo. Sin embargo, a pesar de su resonancia con los movimientos globales hacia la igualdad y el reconocimiento de las voces femeninas en el arte, el mercado aún parece tener una deuda pendiente con la valoración de su obra.

El precio alcanzado por «Geisha Samurai», aunque positivo, pone de manifiesto la brecha existente entre el impacto cultural y conceptual de su trabajo y su apreciación monetaria en el mercado del arte. Esta discrepancia apunta a una subvaloración generalizada de las obras que, como la de García, profundizan en la crítica social y el cuestionamiento de estructuras de poder a través de una narrativa visual rica y desafiante. El arte de García, imbuido de simbolismo y capaz de generar diálogos significativos sobre el empoderamiento femenino y la autodeterminación, merece ser reconocido no solo por su calidad estética sino también por su contribución crítica a las discusiones contemporáneas.

Es imperativo que el mercado del arte reconozca y corrija esta deuda, valorando adecuadamente las obras que, como las de Rocío García, juegan un papel crucial en la representación y exploración de temáticas sociales y de género. La apreciación y cotización en el mercado de obras que abordan estos temas reflejaría no solo un reconocimiento del talento artístico involucrado sino también una comprensión más amplia de la importancia del arte como medio de reflexión social y cambio. La trayectoria de García y el impacto de su obra demandan una reconsideración de cómo el mercado valora el arte que desafía, innova y amplía los límites de la expresión artística, garantizando así que las voces como la de García sean no solo escuchadas sino también justamente recompensadas.

Obras de la colección «Art for The World»

Los resultados de las ventas de las obras de Los Carpinteros, parte de la colección «ART for The World», ofrecen un interesante contrapunto sobre el interés y la valoración del arte contemporáneo cubano en el mercado actual. Por un lado, la obra «Inmunidad» no encontró comprador dentro del rango estimado de USD 8,000 a USD 12,000, lo que podría reflejar una variedad de factores, desde una posible desconexión entre la obra y las tendencias de coleccionismo actuales hasta una valoración más cautelosa del mercado en cuanto a temáticas específicas.

Por otro lado, «Playgrounds & Toys» superó la estimación baja, alcanzando un precio de venta de USD 11,340, lo cual sugiere una apreciación y reconocimiento por parte de los coleccionistas hacia obras que, posiblemente, evocan una nostalgia lúdica o comentan sobre la sociedad de manera sutil y metafórica. Este contraste en los resultados subraya la naturaleza impredecible del mercado del arte, donde el éxito de una obra puede ser tan dependiente del momento cultural y económico como de la propia calidad y el impacto visual de la pieza. La divergencia en el rendimiento de estas dos obras en la subasta recalca la importancia de la narrativa y el contexto en la recepción de arte contemporáneo, y cómo, en última instancia, estos factores pueden influir decisivamente en el interés y la disposición a comprar de los coleccionistas.

ART for The World es una organización no gubernamental fundada con el objetivo de construir un puente entre el arte y la sociedad, donde el arte contemporáneo sirve a propósitos humanitarios. Inspirada en el Artículo 27 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, que afirma que «toda persona tiene derecho a participar libremente en la vida cultural de la comunidad, a disfrutar de las artes», ART for The World busca emplear el arte como una herramienta crucial para fomentar el diálogo entre personas de diversas culturas y visiones del mundo, con el fin de promover la tolerancia y la solidaridad en defensa de los derechos humanos, subrayando la importancia de la relación entre el artista y los temas más apremiantes de nuestro tiempo.

Fundada en 1995 en Ginebra como un resultado directo de la exposición Dialogues of Peace en el contexto del quincuagésimo aniversario de las Naciones Unidas, sus actividades involucran la participación de artistas y cineastas de todo el mundo.

Como un museo sin muros, ART for The World es un esfuerzo colaborativo con la participación de artistas, instituciones internacionales y corporaciones de todos los rincones del planeta, compartiendo ideales y actividades que se expanden y sobrepasan los confines tradicionales del arte, volviéndose más inclusivas y accesibles para un público más amplio.

Su misión es crear, a través del lenguaje universal de las ARTES, un diálogo significativo y duradero entre personas y culturas para fomentar la tolerancia y la solidaridad, y promover la cultura y la educación como un derecho humano.

A modo de conclusiones

Los resultados de esta subasta, en su conjunto, indican no solo una fuerte demanda y un reconocimiento del arte latinoamericano sino también una diversificación en los intereses de los coleccionistas. Mientras que algunos artistas consagrados como Lam continúan dominando con precios que superan las expectativas, artistas contemporáneos y menos conocidos también están encontrando su lugar en el mercado, lo que sugiere una apertura y curiosidad crecientes por parte de los coleccionistas.

Este evento sirve como un recordatorio del dinámico y evolutivo panorama del arte latinoamericano, donde la historia, la cultura y la innovación artística se entrelazan para capturar la imaginación de coleccionistas y aficionados por igual. A medida que el mercado global del arte continúa expandiéndose y diversificándose, estas subastas se convierten en momentos cruciales para evaluar el pulso del interés y la inversión en el arte de la región, proyectando una visión prometedora para su futuro.